A horas de hacer pública su renuncia, en forma televisada, el ex mandatario Evo Morales dijo, por Twitter, que quieren apresarlo ilegalmente. También denunció que su domicilio fue asaltado. “Los golpistas destruyen el Estado de derecho”, remató. Señaló que “un oficial de la policía anunció públicamente que tiene instrucción de ejecutar una orden de aprehensión ilegal en contra de mi persona” y que “grupos violentos asaltaron mi domicilio”.
Previamente, al explicar los motivos de su renuncia, Morales se refirió a un “golpe cívico, político y policial” instigado por “grupos oligárquicos que conspiran contra la democracia”. Y lamentó que la Policía se haya replegado a sus cuarteles en los últimos días.
“Renuncio a mi cargo de presidente para que (Carlos) Mesa y (Luis Fernando) Camacho no sigan persiguiendo, secuestrando y maltratando a mis ministros, dirigentes sindicales y a sus familiares”, dijo el ex presidente. Se refería a los líderes opositores que convocaron a violentas protestas en su contra, desde el día siguiente de los comicios del 20 de octubre.
Mesa fue candidato presidencial y ex mandatario que quedó segundo en las elecciones de octubre. Pide que el Congreso Nacional designe al sucesor de Morales para convocar a nuevas elecciones. En tanto que Camacho es el presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, que aglutina a las organizaciones civiles y empresarios tradicionalmente opositores al gobierno de Evo. Es el que encabezó las protestas y ataques de los últimos días.
“Quiero que sepa el pueblo boliviano que no tengo por qué escapar, que prueben si estoy robando algo. Si dicen que no hemos trabajado, vean las miles de obras construidas gracias al crecimiento económico”, desafió. “Los humildes, los pobres que amamos la Patria vamos a continuar con esta lucha”, anticipó. También dijo: “nos acusan de dictadura los que perdieron. Hoy Bolivia es una Patria libre, con inclusión, dignidad, soberanía y fortaleza económica”. (Télam).